(Miguel Enrique Villavicencio) Doce líneas estratégicas contempla el plan de gobierno de Henrique Capriles, y cuyo propósito es revertir el grave deterioro que ha sufrido el aparato agro-productivo nacional, a causa de las malas políticas implementadas durante 14 años por el Presidente Chávez, según lo señaló el profesor Werner Gutiérrez, decano de la facultad de Agronomía de La Universidad del Zulia (LUZ).
Gutiérrez sostiene que, para que realmente Venezuela alcance la seguridad y la soberanía agroalimentaria de la cual tanto ha hablado el actual gobierno, primero debe garantizarse que el 75% de los alimentos que se consumen en el país, sean productos elaborados en suelo patrio.
“Hay que estructurar un sub sistema de financiamiento agrícola nacional, que responda a la naturaleza y realidades del sector, a través de montos, plazos, garantías y tasas de interés preferenciales. Hay que mantener y fortalecer planes de financiamiento agrícola con mayor énfasis en los pequeños y medianos productores, dándole prioridad a los rubros estratégicos de la nación, garantizando la supervisión, asistencia técnica y ejecución”, señaló.
Asimismo, en el nuevo gobierno se debe armonizar corresponsablemente con todos los sectores agroproductivos y técnicos, lo que tiene que ver con la sanidad animal y vegetal, con el propósito de garantizar la producción agropecuaria a nivel nacional, regional y municipal cumpliendo con los acuerdos y normas internacionales que rigen esta materia.
En cuanto a insumos y servicios, Gutiérrez expone que el Gobierno nacional debe garantizar la oferta y acceso oportuno de insumos agropecuarios, y a su vez estimular, fomentar y consolidar la prestación de los agroservicios.
“Para ello el Ejecutivo debe promover el desarrollo de nuevas tecnologías para la producción de insumos, maquinarias y equipos que disminuyan la dependencia en esta materia. Así mismo, tiene que fomentarse el uso de productos orgánicos y biodegradables en la producción agropecuaria”, aseveró.
También la producción agropecuaria debe ser considerada como una actividad económica atractiva, rentable, sostenible, organizada, competitiva, generadora de empleos y protagonista de la verdadera soberanía nacional, basada en la zonificación territorial mediante el uso racional y agroambiental de los recursos, que merece todo el apoyo del Estado venezolano para promover la seguridad agroalimentaria que tanto se requiere.
“Para eso es primordial y necesario que esté sustentada en un marco legal, la cual garantice la completa seguridad jurídica de la propiedad y bienes; así como la seguridad personal de los productores, su familia y trabajadores”, indicó.
El catedrático propone que se deberán establecer como prioridad nacional las cuencas hidrográficas del país, permitiendo que todas las instancias de gobierno, instituciones, universidades, ONGs, personas naturales y empresas, trabajen coordinadamente para lograr los objetivos planteados.
Mercados
Añade Gutiérrez, que en el contexto de la economía social de mercado, el sector agropecuario debe ser estimulado a través del establecimiento de precios justos y condiciones estables, mediante acuerdos entre el Gobierno nacional, los productores agropecuarios, el sector transformador y los consumidores, a través de las juntas nacionales por rubros estratégicos.
“El desarrollo agropecuario nacional se deberá engrandecer mediante la revisión, adecuación y fortalecimiento del marco jurídico legal que de manera directa e indirecta regula la actividad agropecuaria, forestal, acuícola y ambiental, con el objeto de que sea estimulante y no punitivo, y así se pueda garantizar la seguridad alimentaria y la propiedad privada”, apuntó
Cree Gutiérrez que es necesario reestructurar y adecuar las instituciones con competencia agrícola, para garantizar el cumplimiento y articulación de los planes, programas y proyectos agropecuarios a nivel nacional, regional y municipal.
De igual forma, el nuevo Ejecutivo nacional garantizará el desarrollo rural sustentable mediante la promoción, adecuación y fortalecimiento de la seguridad social y laboral-ocupacional, para lograr elevar la calidad de vida de la población, la cual ha disminuido en todos sus niveles en los últimos años.
Otra de las estratégicas que serán puestas en marcha bajo el nuevo gobierno, es precisamente que el Estado debe afianzar la seguridad personal de los productores y sus familias en los campos venezolanos, como única manera de garantizar la permanencia de estos en las zonas rurales. Igualmente debe fortalecer la soberanía en las áreas fronterizas mediante el resguardo de las zonas limítrofes, para así propiciar el asentamiento y desarrollo agropecuario, forestal y acuícola en estas regiones geográficas.
Talento humano y tecnología
Señala que el Estado debe promover el sistema de investigación y transferencia tecnológica, y donde se involucre al sector privado, conjuntamente con la participación de las universidades y centros de investigación, para así impulsar la soberanía agroalimentaria y el desarrollo agrícola.
De igual manera, el gobierno propiciará la capacitación y el emprendimiento de los productores y trabajadores agrícolas, dado que esto elevará los procesos de producción y los harán más eficientes técnica y económicamente, siempre en armonía con el ambiente y el bienestar social”, expresó.
Hecho en Venezuela
Sostiene que la producción agropecuaria venezolana, ha retrocedido con el gobierno de Chávez a niveles alarmantes, casi que a los tiempos de la colonia.
“La producción nacional está por el suelo porque se le ha dado prioridad a la economía de puerto, que a los productos que lleven la marca “Hecho en Venezuela”. Obviamente, Capriles tendrá que seguir importando alimentos hasta desmontar completamente este tipo de políticas, y se comprarán alimentos a otros países, de acuerdo a la cantidad que se requiera y que no coincidan con los tiempos de cosechas nacionales”, afirmó.
Asevera que el gobierno de Capriles hará que Venezuela tenga mayor productividad en materia de economía agropecuaria, “y no como ahora que estamos muy por debajo competitivamente de países como Perú, Colombia, Uruguay, Chile, entre otros. No es falso que las exportaciones han disminuido en 92%, mientras que las importaciones han crecido en más de un 200% en los 14 años que tiene el actual Ejecutivo nacional”, afirmó.
“Es tanto el atraso existente; sobre todo, a nivel tecnológico, que no usamos nuevas moléculas que, desde todo punto de vista, son más eficientes para el usuario y medio ambiente. En Brasil, Bolivia, Argentina y otras naciones usan novedosos métodos de producción agroalimentarios, mientras que en Venezuela no los utilizamos, pero si estamos adquiriendo muchas importaciones de esos alimentos, que son llamados transgénicos”, concluyó diciendo Gutiérrez.
Fuente: Agronota
No hay comentarios:
Publicar un comentario